Luego de su fallecimiento, se realizaron múltiples reconocimientos de su vida y obra. En este aspecto, el papel de Gonzalo (hijo) y Claraluz fueron de suma importancia. Claraluz se comunica con Ricardo Alegría, y se inicia un proceso que eventualmente resulta en una exhibición artística en el Colegio de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CIAA) para 1973. Vemos en esta sección las cartas con el ICPR, articulo de Margarita Ashford, amiga de Claraluz, y las tarjetas de invitación al evento.